LAS BEBIDAS ENERGIZANTES NUNCA SE DEBEN MEZCLAR CON ALCOHOL

Es un error creer que las bebidas energizarte pueden desaparecer por completo el cansancio, la fatiga, el sueño. 

Los efectos de la misma pueden durar en el organismo unas dos horas aproximadamente teniendo algunos efectos secundarios. Según la cardióloga, Pura Henríquez, del Instituto de Cardiología.

P. ¿De qué están compuestas?

R. Están compuestas principalmente por cafeína, varias vitaminas, y otras sustancias, que eliminan la sensación de agotamiento de la persona. Estas bebidas incluyen en su composición glucosa y otros azúcares que proporcionan energía al cuerpo, pero no eliminan realmente la fatiga muscular, ni el agotamiento en general, solamente inhibe temporalmente estas sensaciones, por lo tanto es normal una sensación de decaimiento.

P. ¿Con que intención nacen las bebidas?

R. Todas éstas nacen con la intención de incrementar la resistencia física, habilitar reacciones más veloces, lograr un nivel de concentración mayor, estimular el metabolismo, y ayudar a eliminar sustancias nocivas para el cuerpo. Volviéndose así famosa en deportistas, estudiantes, empleados nocturnos, entre otros.

P. ¿Con qué y por qué no mezclar?

R. Nunca se deben de tomar con alcohol, porque un estimulante con un depresivo puede causar una arritmia cardíaca.

El problema está en la alta concentración de múltiples sustancias que son estimulantes. Sin embargo mucha gente, haciendo caso omiso a tales rumores, ignoran lo que de verdad puede llegar a ser peligroso.

Las bebidas energizantes son estimulantes, y las alcohólicas son depresivas, que al ser mezcladas, pueden inhibir los efectos del alcohol, aumentando el consumo del mismo.

P. ¿Quiénes no deberían tomarlas?

R. Se desaconseja el consumo de estos productos en personas con afecciones cardíacas, hipertensión arterial, trastornos cerebrales y neurológicos, embarazadas, menores de 16 años y diabéticos. 

P. ¿Cuáles consecuencias se pueden presentar?

R. Las bebidas energizantes incluyen cafeína, y esta mezcla puede hacer creer a las personas que no están ebrias, aumentando los episodios de borracheras, y los peligros que éstas conllevan, como un coma etílico, además de un posible infarto causado por la mezcla de una sustancia inhibitoria y otra estimuladora, ambas sobre el mismo órgano (el corazón). La cafeína estimula el sistema nervioso central y el cardíaco, facilita la liberación de catecolaminas como la adrenalina y la dopamina, estimula la vasodilatación. 

Efectos a nivel cardiaco

Una taza de café tiene aproximadamente 100 mgs de cafeína, una bebida energizante puede tener hasta 160 mgs de cafeína.

La cafeína en altas dosis, como se encuentra en las bebidas energizantes, produce una reducción del flujo sanguíneo al corazón, de la reserva del flujo sanguíneo miocárdico en reposo y en ejercicio. 

Estos efectos aparecen en cualquier persona, no importa la edad. No se debe confundir con bebidas rehidratantes ni con otro tipo de bebidas como las gaseosas (refrescos), ya que inclusive en los mismos envases se advierte que no se considera una bebida hidratante. Por contener altas dosis de cafeína pueden producir dependencia