Parece muy dramático, pero eso puede empezar a ocurrir. Pero tranquilos,
solo para coches nuevos. Los existentes, podrán circular hasta que les llegue
su hora. Eso sí, cada vez con más restricciones.
El Ministerio Austríaco de Agricultura y Medio Ambiente está trabajando en
un estudio que podría significar el principio del fin para el automóvil
tradicional de motor térmico, ya sea de gasolina, gasóleo o gas natural.
Y eso no es novedad, porque en la India, Noruega y Holanda, ya están
considerando esa misma prohibición, aunque a partir de 2025.
Hombre, ya sabemos que luego vendrán las multinacionales amenazando con la
pérdida de empleos: Falso, se perderán empleos en los coches convencionales
pero se creará el mismo número de empleos en los coches eléctricos y se crearán
nuevos empleos en baterías y electricidad renovable, en sustitución de los
petrodólares que ahora pagamos al Golfo Pérsico.
Sí, pero eso lo pueden hacer Noruega, Austria y Holanda, porque son
pequeños y ricos. Sí, pero vemos que también quiere hacerlo la India, que es
grande y pobre.
Bueno, no será fácil. Ni será en 2020.
Pero el reloj de arena ya ha sido
invertido.
Como sea, la tecnología ya está aquí. Y va a seguir mejorando y
abaratándose.
Los coches de motor térmico se seguirán construyendo y vendiendo. Pero poco
a poco, ciudadano a ciudadano, empresa a empresa, país por país, van a ir
renovando sus respectivas flotas. Y van a hacerlo hacia coches eléctricos.
Alimentados por electricidad renovable.
En 2050 no habrá coches convencionales. Bueno sí, en los museos, en lugares
remotos, en algún país petrolero...
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