Hasta
la fecha, dos exámenes de las pruebas disponibles han señalado una relación
entre la contaminación del aire y muerte fetal. Pero la fuerza de la asociación
encontrada fue débil y como han aparecido más pruebas, les llevó a los autores
a realizar una revisión sistemática de la investigación publicada Hay
evidencia que insinúa una relación entre la contaminación del aire y un mayor
riesgo de muerte fetal, según indica un resumen de los datos disponibles
publicado en la edición digital de 'Occupational & Environmental Medicine'.
Se
estima que 2,6 millones de niños en todo el mundo nacieron muertos a las 28
semanas o más en 2015, con una amplia variación geográfica en la prevalencia,
lo que sugiere que la mayoría de estas muertes se pueden prevenir, dicen los
autores del estudio. Hasta la fecha, dos exámenes de las pruebas disponibles
han señalado una relación entre la contaminación del aire y muerte fetal.
Pero
la fuerza de la asociación encontrada fue débil y como han aparecido más
pruebas, les llevó a los autores a realizar una revisión sistemática de la
investigación publicada hasta 2015.
Se
eligieron 13 estudios para incluirlos en el resumen, que encontró una
asociación entre la exposición a la contaminación del aire --particularmente
durante el tercer trimestre del embarazo-- y un mayor riesgo de muerte fetal.
En concreto, un aumento de 4 ug/m3 en la exposición a pequeñas partículas de
menos de 2,5 de diámetro (PM 2,5) se vinculó con un 2 por ciento más de riesgo
de muerte fetal, mientras que la exposición a dióxido de nitrógeno, monóxido de
carbono, ozono y PM10 también se vinculó a mayor riesgo.
Los
investigadores, de la Universidad de Oulu, en Finlandia, dicen que las
diferencias en el diseño del estudio y el tipo de contaminante evaluado
hicieron imposible incluir los 13 estudios en el análisis final.
En un
editorial de la doctora Marie Pedersen, del Centro de Epidemiología y
Proyección de la Universidad de Copenhague, en Dinamarca, pone de relieve que
la mayoría de estos estudios anteriores no fueron capaces de tener en cuenta
los factores potencialmente influyentes, como la obesidad, las infecciones, el
alcohol y la ocupación y el estrés, todos los cuales se han asociado con un
mayor riesgo de muerte fetal.
Por
otra parte, la mayor parte de la evidencia existente se basa en los datos de
monitorización del aire, que no representan adecuadamente las variaciones en
los niveles dentro de la misma ciudad. A pesar de estas cuestiones, los autores
del estudio concluyen: "Sin embargo, la evidencia existente es sugerente
de la causalidad de la contaminación del aire y la muerte fetal sin identificar
con precisión el momento de la exposición".
Pero
agregan que se necesitan más investigaciones para fortalecer el cuerpo de la
evidencia disponible: "Con los estudios limitados sobre este tema
relevante, nuestra revisión sugiere una gran prioridad de investigación en el
futuro".
"La
muerte fetal es una de las tragedias más descuidadas en la salud global hoy en
día y la evidencia existente resumida [por los autores] merece una
investigación adicional", escribe Pedersen."Si se confirma la
evidencia de una asociación entre la polución del aire y la muerte fetal en estudios
futuros, sería de gran importancia para la salud pública", añade.
No hay comentarios:
Publicar un comentario