En los últimos días varios
países de América Latina han sido impactados por duros golpes de la naturaleza.
La semana pasada varias islas
del Caribe recibieron el azote del huracán Irma y México fue sacudido por un
terremoto de gran magnitud. Esto lleva a la gente a preguntarse qué está
pasando en la región.
Algunos expertos atribuyen el
tamaño y el incremento de estos desastres al cambio climático, otros consideran
que esto nada tiene que ver. Pero lo cierto es que los fenómenos van en
aumento.
Esto lo evidencia el estudio “Desastres, crecimiento económico y respuesta fiscal en
los países de América Latina y el Caribe, 1972-2010”, publicado en
abril pasado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
El citado análisis realizado
por el Coordinador de la Unidad de Desarrollo Sostenible y Evaluación de la
Cepal, Omar Bello, contiene datos alarmantes. Establece que en el período
1970-2010 los desastres se incrementaron un 410% en Centroamérica y 372% en el
Caribe. En América del Sur el incremento fue de 288%.
El autor detalla que en el
mencionado período ocurrieron 1,737 desastres en América Latina y el Caribe, de
los cuales 1,392 fueron de origen climático (como las tormentas), 227 de origen
geológico (como los terremotos) y 118 de origen biológico (aquí se encuentran
las epidemias, entre otros).
En las cuatro
décadas analizadas ocurrieron alrededor de 10,271 desastres en el mundo, de los
cuales más de un 16% se produjeron en países de América Latina y el Caribe,
agrega el autor.
El estudio señala que sólo los
fenómenos de origen climático se incrementaron un 448% y un 438% en Centroamérica
y el Caribe, respectivamente, por tanto los desastres climáticos como las
tormentas, las inundaciones y las sequías han ido incrementándose
“ininterrumpidamente”, como explica el autor.
“Entre la década de 1970 y la
del 2000 los desastres climáticos aumentaron un 326% debido a la evolución de
las tormentas, reflejándose con 453% de incremento.En las cifras subregionales
incidió lo acontecido en el Caribe y en Centroamérica, donde las tormentas
crecieron un 540% y un 533%, respectivamente, y otros desastres climáticos
desde un 309% y un 425%, respectivamente”, establece el análisis.
El autor indica que las dos
subregiones de América Latina más intensamente afectadas son Centroamérica y el
Caribe, donde la ocurrencia de fenómenos es común y cuya frecuencia se ha
incrementado a lo largo del tiempo.
IMPACTOS ECONÓMICOS DE LOS DESASTRES ZONAS MÁS AFECTADAS
Indiscutiblemente los desastres, ya sean de origen climático, geológico o biológico, impactan en las economías de los países.
De acuerdo al estudio de la
Cepal, el Caribe es la región donde los daños por esta causa han representado
un mayor porcentaje del producto interno bruto (PIB), superando el 8% en seis
ocasiones. Al Caribe le sigue Centroamérica, donde los daños causados por
desastres han superado el 8% del PIB en dos ocasiones.
El autor explica que los
desastres afectan las finanzas públicas y los precios, entre otras variables.
No hay comentarios:
Publicar un comentario