Ahora que muchas instituciones públicas y privada se han visto en la
obligación de implementar de lleno el teletrabajo o el trabajo desde casa,
significa que las reuniones laborales ya no serán de manera presencial, sino
vía internet, haciendo uso de las diversas plataformas de videollamadas
existentes.
Tal vez lo veas como algo más conveniente para ti porque lo puedes hacer
desde la comodidad de tu hogar, pero, cuidado; tampoco creas que es lo mismo
que video charlar con tus familiares o amigos. Recuerda que estamos hablando de
trabajo, lo que amerita formalidad y todo un protocolo a seguir.
Presta atención a estos consejos para que, después de que pase la
cuarentena y regreses a tu oficina, lo próximo que sepas de tus superiores no
sea que ya no formas parte de la empresa.
AMBIENTE
Un punto importantísimo es cuidar el ambiente que se verá de fondo durante
tu videoconferencia. Debes buscar un punto de la casa en el que no haya mucho
ruido y tampoco personas merodeando detrás de ti.
Si en tu casa es casi imposible encontrar un punto de paz y tu única opción
es tu habitación, asegúrate de que allí no haya elementos personales a tu
alrededor y, mucho menos, pretendas sostener tu reunión virtual desde la
comodidad de tu cama. Si tienes escritorio, sentarte allí es la mejor opción.
Si no tienes, lleva una silla y colócala en un punto con buena iluminación y
preferiblemente con una pared de fondo.
VESTIMENTA
Aunque esto dependerá mucho de con quien sea la videoconferencia o del tipo
de trabajo que realices, las camisetas sin mangas y bermudas, en el caso de los
hombres; blusas que muestren de más, los famosos tubis y cara lavada, como si
te acabas de despertar, definitivamente son un no rotundo.
Vístete como si la reunión fuera presencial sin importar que estés en casa.
Saco y camisa o camisa con corbata para los hombres, y camisa o blusa formal
con bléiser para las mujeres, es lo más recomendable.
COMPORTAMIENTO
Hay cosas básicas que no tienen lugar en un video llamado de trabajo, como
comer frente a la cámara, el sonido de la escritura de tu teclado, entablar
conversaciones con alguien que esté contigo en el momento o usar tu teléfono.
A
esto agrega que tampoco debes sentarte como si estuvieras en casa (aunque en
efecto si lo estés) con las piernas encima de una mesa o arriba de la silla en
la que estás sentado
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