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viernes, 29 de agosto de 2025
¿QUÉ ES LA CAPILARIDAD DEL SUELO?
Es la razón por la que el agua puede “subir” desde capas
profundas del suelo… ¡como si desafiará la gravedad!
La capilaridad es una propiedad física del agua que le
permite moverse entre los poros del suelo gracias a dos fuerzas:
Adhesión (el agua se
pega a las partículas del suelo)
Cohesión (el agua se une a otras moléculas de agua)
Así, el agua puede
moverse en todas direcciones: hacia los lados, hacia abajo… ¡y hacia arriba!,
como si viajara por hilos invisibles.
Este fenómeno es vital para que las raíces de las plantas
accedan al agua aunque no estén en contacto directo con ella.
Pero no todos los
suelos retienen o mueven el agua igual:
Suelos arenosos =
poros grandes → baja capilaridad, el agua se filtra rápido.
Suelos arcillosos =
poros pequeños → alta capilaridad, pero el agua puede quedar atrapada y no
disponible.
Suelos equilibrados
con buena materia orgánica = mejor capilaridad y disponibilidad hídrica para la
planta.
La materia orgánica
mejora la estructura del suelo, estabiliza los poros y aumenta la eficiencia
del agua por capilaridad.
Sin ella, el agua se pierde rápido o no llega donde la
planta la necesita.
Entender la capilaridad permite optimizar el riego, elegir
mejor el sustrato y cuidar el agua, especialmente en zonas secas.
jueves, 28 de agosto de 2025
Imagina que la planta es como una fábrica muy ordenada, y el agua es el combustible y el transporte que hace que todo funcione.
1. Entra por las raíces
Las raíces absorben el agua
del suelo. Esto ocurre gracias a un proceso llamado ósmosis, que es como cuando
una esponja seca chupa agua porque afuera hay más agua que adentro.
2. Viaja por “tuberías”
internas
Una vez dentro, el agua sube
por unos conductos llamados xilema.
Aquí no hay bombas eléctricas:
el agua sube gracias a la presión desde las raíces, la capilaridad (el agua
“trepa” por tubos muy finos) y la transpiración (cuando las hojas pierden agua
al aire, jalan más agua hacia arriba).
3. Actúa como disolvente y
transportador
El agua no solo es agua pura:
arrastra sales minerales y nutrientes desde el suelo. Así la planta tiene
“materia prima” para construir tallos, hojas, flores y frutos.
4. Combustible para la
fotosíntesis
En las hojas, el agua se
combina con el dióxido de carbono (CO₂) y, usando la luz solar, la planta
fabrica azúcares en la fotosíntesis.
La reacción simplificada es:
Agua + CO₂ + Luz → Azúcares +
Oxígeno
5. Mantiene la forma de la
planta
El agua llena las células
vegetales como si inflara globitos. A esa presión interna se le llama
turgencia. Si falta agua, las células se desinflan y la planta se marchita.
6. Regula la temperatura
Cuando la planta “suda”
(transpira), el agua que se evapora enfría las hojas, como un aire acondicionado
natural.
En resumen fácil:
El agua entra por las raíces,
viaja como un tren con nutrientes, alimenta la fotosíntesis, mantiene la planta
erguida y la refresca. Sin agua, la fábrica se apaga.
Enemigos de un Sistema de Gestión Ambiental
Un Sistema de Gestión
Ambiental (SGA) basado en ISO 14001 puede enfrentar varios “enemigos” que
obstaculizan su correcta implementación, mantenimiento y mejora continua. Estos
no siempre son externos: muchos se generan dentro de la misma organización.
Enemigos de un SGA ISO 14001
1. Falta de compromiso de la alta dirección
• Si la dirección no lidera ni respalda con
recursos, el sistema se queda en lo documental y pierde fuerza.
2. Resistencia al cambio
• Empleados o mandos medios que no adoptan
nuevas prácticas ambientales por desconocimiento, costumbre o falta de
incentivos.
3. Enfoque solo en la certificación
• Implementar el sistema solo para obtener el
certificado, sin una convicción real de mejorar el desempeño ambiental.
4. Deficiente comunicación interna
• Si los objetivos ambientales no se
transmiten claramente, el personal no entiende su papel en el cumplimiento.
5. Falta de capacitación y sensibilización
• Empleados sin formación ambiental mínima
pueden cometer errores que afectan al sistema (ej. manejo inadecuado de
residuos).
6. Escasa integración con otros sistemas de
gestión
• Tratar el SGA como algo aislado y no vincularlo
con calidad, seguridad o estrategia empresarial, lo hace más vulnerable.
7. Documentación excesiva o burocrática
• Procesos poco prácticos, llenos de papeleo,
que generan rechazo y desinterés.
8. No identificar bien los aspectos e impactos
ambientales
• Una mala evaluación inicial lleva a
priorizar acciones equivocadas o dejar riesgos reales sin control.
9. Falta de recursos (humanos, financieros y
tecnológicos)
• Sin presupuesto ni personal suficiente, las
acciones ambientales quedan en planes, pero no se ejecutan.
10. No dar seguimiento ni medir desempeño
• Carecer de indicadores claros impide saber
si realmente se están reduciendo impactos ambientales.
11. Incumplimiento legal o normativo
• Desatender la legislación ambiental local,
lo que puede llevar a sanciones y pérdida de credibilidad.
12. Falta de mejora continua
• Pensar que con implementar una vez es
suficiente, sin innovar ni revisar periódicamente los objetivos ambientales.
miércoles, 27 de agosto de 2025
“Cuando la linealidad no es tan perfecta como el R² lo pinta”
"Un R²
de 0.999 puede impresionar… pero no siempre significa que la linealidad del
método sea aceptable."
En validación de métodos
analíticos, la linealidad se evalúa midiendo la capacidad de un método para
proporcionar resultados directamente proporcionales a la concentración del
analito en un rango específico.
Error común: basarse
únicamente en el coeficiente de determinación (R²).
Aunque un valor cercano a 1 indica buena
correlación, no siempre garantiza que los residuos estén distribuidos de forma
aleatoria o que el modelo sea apropiado.
Ejemplo práctico:
En un método HPLC para
vitaminas, obtuvimos un R² = 0.9995, pero el análisis de residuos reveló una
curvatura sistemática. Esto llevó a ajustar el rango de trabajo y evitar
errores en concentraciones extremas.
Recomendación:
Complementar el R² con análisis de residuos,
pendiente e intercepto, y pruebas estadísticas (ANOVA de regresión).
¿En tu laboratorio revisan los residuos o se
limitan a mirar el R²?
República Dominicana alza la voz contra la contaminación por plásticos
En el marco de la quinta
sesión del Comité Intergubernamental de Negociación (INC-5.2) en Ginebra, el
Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, encabezado por el
viceministro de Recursos Costeros y Marinos, José Ramón Reyes, defendió la
necesidad de un tratado global vinculante que regule todo el ciclo de vida del
plástico.
La postura del país, como
miembro de la Coalición por la Alta Ambición, se centra en:
• Reducir la producción de
polímeros plásticos primarios.
• Eliminar plásticos
problemáticos de un solo uso y químicos de alta preocupación.
• Garantizar transparencia en
toda la cadena de valor.
• Establecer un mecanismo
financiero robusto para apoyar a los países en desarrollo.
“Para los Estados Insulares en
Desarrollo, este no es un debate abstracto, es una realidad diaria que afecta
nuestra economía y ecosistemas”, afirmó el viceministro Reyes.
hashtag#MedioAmbienteRD
domingo, 24 de agosto de 2025
Los girasoles son héroes del planeta
Pueden limpiar plomo, arsénico
y radiación del suelo, mientras alimentan a abejas y mariposas
Siembra girasoles. Sana el
suelo. Salva a los polinizadores.
sábado, 23 de agosto de 2025
¿Alguna vez te has preguntado cuánta agua bebe un árbol maduro en un abrasador día de verano?
La respuesta puede
sorprenderte: entre 50 y 200 galones (225 y 900 litros) por día para especies
de alta demanda de agua como el roble.
Eso parece mucho, hasta que
haces los cálculos sobre el almacenamiento de agua del suelo.
El sistema de raíces de un
árbol de 25 m de altura generalmente se extiende radialmente para igualar su
altura, ocupando alrededor de 1.178 metros cúbicos.
En un buen suelo franco (25%
de contenido de agua a capacidad de campo), eso es aproximadamente 295,000
litros de almacenamiento de agua disponible.
Entonces, incluso con un
consumo máximo de 900 litros por día, un solo árbol maduro tiene suficiente
agua en el suelo para durar 327+ días sin lluvia.
La ingeniería de la naturaleza
es notable y los árboles han desarrollado sofisticados sistemas de raíces que
actúan como vastos depósitos subterráneos, recolectando y almacenando agua en
enormes volúmenes de suelo.
Por supuesto, la realidad es
más compleja: los árboles compiten con otra vegetación y el tipo de suelo marca
la diferencia.
Los suelos arenosos retienen
mucha menos agua que los suelos arcillosos o de turba.
Pero la próxima vez que vea un
roble antiguo que se mantiene fuerte durante una sequía, recuerde: no se trata
solo de sobrevivir con suerte.
Se basa en un banco de agua
subterráneo que ha tardado siglos en construirse.
miércoles, 20 de agosto de 2025
LAS MALEZAS TAMBIÉN SON BIOINDICADORES
"No todas las malezas son enemigas… algunas vienen a
contarte un secreto del suelo."
Las malezas no solo compiten por agua, luz y nutrientes. En
realidad, muchas especies vegetales llamadas “invasoras” son también
bioindicadores naturales: su presencia puede dar pistas sobre el estado físico,
químico y biológico del suelo.
¿Qué es un bioindicador?
Es una especie vegetal (o animal) cuya presencia,
abundancia o forma de crecimiento refleja condiciones ambientales particulares.
En el caso de las malezas, se adaptan y prosperan donde otros cultivos fallan,
revelando problemas invisibles a simple vista.
¿Qué pueden indicar
las malezas?
sábado, 16 de agosto de 2025
La Tierra aún guarda secretos con el poder de sanar
En las profundidades del suelo
terrestre, donde la vida parece imposible, un filo bacteriano hasta ahora
desconocido ha sorprendido a la ciencia. Se trata de Sysuimicrobiota, que no
solo sobrevive en condiciones extremas, sino que prospera, incluso en la
llamada Zona Crítica, que se extiende desde la superficie terrestre hasta más
de 200 metros de profundidad, donde el oxígeno escasea y los nutrientes son
mínimos.
Su resistencia y adaptabilidad
ha despertado el interés de los científicos, pues ayudaría a limpiar
naturalmente aguas subterráneas contaminadas al filtrarlas naturalmente antes
de que lleguen a los acuíferos. Tiene una bioquímica única, con genes
especializados en degradar contaminantes persistentes como pesticidas y
herbicidas.
Actúa donde otras bacterias
fallan: mientras las bacterias superficiales eliminan carbono, nitrógeno y
azufre, Sysuimicrobiota se encarga de los contaminantes más duros. Ahora, los
investigadores trabajan en el cultivo de este microbio en el laboratorio para
comprender mejor su fisiología y su capacidad para procesar contaminantes.
FUENTE:
PNAS - Diversification, niche adaptation, and evolution of a candidate phylum
thriving in the deep Critical Zone.